UN CIRIO EN MEDIO DE UN TEMPLO
Nos conecta con otro mundo, la imaginación lo imperceptible, es las alas de lo bello, la imaginación hace del cuerpo una materia incorruptible, la imaginación, exhuma los cuerpos muertos, la imaginación. Un cirio siempre encendido en un templo, la imaginación, el pináculo de lo inefable, la imaginación, una paloma blanca que después del diluvio voló, la imaginación. Ayer imaginé: el mundo dejó de ser palúdico y mal oliente, la gente vendía besos en vez de armas, los jóvenes no vivían de un de repente. Ayer imaginé: yo iba caminando por senderos, nunca escogí, el mundo en mis manos, llevaba, empezaba a vivir los años, nunca viví. Ayer imaginé: en un altar espiritual mi ser, contemplaba, nadie tenía sed, el agua fresca de nuestro manantial, bebíamos. Sí. ¡Ella es la imaginación! Ella desaparece aquella pesada cruz de mis hombros, un paraíso de la nada, crea, ella se regoc...