LINEAS PAGANAS
COMULGANDO CON LA HUMANIDAD Desde hace unos años he estado participando de lo que hoy conocemos como Eucaristía, pero en muchos casos, debería llamarse adoctrinamiento o en todo caso la representación de aquellas ansias utópicas de mantener a la gente en la ignorancia. Hasta hoy, he participado incontables veces, y digo que he participado, porque no solo he escuchado pasivamente, sino que también he reflexionado y analizado cada palabra, cada gesto con una agudeza empedernida. Hoy más que nunca creo fehacientemente que voy a la eucaristía no por los motivos y las razones irracionales que antes había escuchado o me habían inculcado. Cualquier persona con algunos argumentos y con un poco de lucidez podría decidir no ir si no encuentra ningún placer o satisfacción, liberación o claridad de fundamentos. Pero no es mi caso, porque sigo yendo, precisamente, para dedicarme visceralmente a hacer casi todo lo contrario. La eucaristía también se puede percibir sin Dios, porque lo que...