TE DOY MIS OJOS

Película: “Te doy mis ojos”

Breve Resumen de la película

Pilar decide irse a vivir a la casa de su hermana junto a su hijo para acabar con el maltrato de su esposo. Después de unos días, Pilar empieza a trabajar en una iglesia como vendedora de boletos. Entonces, pilar a empieza a vestirse diferente y aparece Antonio (esposo) para reconquistarla, objetivo que logra. Empiezan a vivir juntos. Luego de unos días pilar le comenta a Antonio que ella tiene un trabajo relacionado con las pinturas, por lo tanto, tiene que irse fuera de la ciudad, pero su esposo no quiere. Finalmente, pilar decide irse, entonces, Antonio se molesta, la desnuda y la empuja al balcón. Luego, pilar va a la comisaría para denunciar el hecho. Al final, pilar decide irse pero Antonio no quiere y le dice que si va se mataría. Pilar se va. Antonio se queda solo.

Algunas interpretaciones a  partir de los hechos

A partir de este breve resumen y delo acontecido en la película se puede notar ciertos elementos que pueden ayudar a entender mejor el tema de la violencia, ya que no hablar de la violencia también es violenta, ya que convierte a las personas en cómplices de actos deplorables.

En uno de los primeros momentos Pilar decide “salir” de su casa, pero no es  una despedida de un lugar físico, sino de un espacio diseñado por el maltrato, en este sentido salir de la casa no es más que el intento de poner fin a un proceso de perturbación. La salida no solo tiene que ver con el lugar que se deja, sino también con el lugar nuevo que se busca. El alejamiento permite ver la situación desde una perspectiva mucho más holística. Desvincularse del otro para encontrarse con uno mismo es uno de los pasos para encontrar un espacio interno. Después de unos días Pilar empieza a trabajar en una Iglesia, un espacio cultural, no es gratuita la presencia de la Iglesia, ya que permite vislumbrar nuevas oportunidades, simbolizadas como lugares de tranquilidad y paz, pero no es la iglesia que está afuera, sino el templo dentro de uno mismo, donde la redención debería empezar. Pilar empieza a vender boletos: una señal de que intenta que otra gente entre en el lugar donde ella trabaja. Un lugar pintado por la angustia, la agresividad y el maltrato por parte de su esposo. Por eso la iglesia simbólicamente es el lugar del encuentro con el otro desconocido, pero que no insulta, no denigra, no maltrata. Pero también puede significar el lugar donde un ser omnipotente habita, entonces, él tiene que hacer algo porque Pilar, débil, frágil parece no poder hacer nada ante la violencia, sin embargo, ha hecho bastante: salir al encuentro de nuevas posibilidades es encomiable.

Cuando Pilar siente que el mundo puede ser diferente, empieza a vestirse con elegancia, cuidado y embellecimiento. Todo parece empezar de nuevo, pero cuando la paz empieza a vislumbrar nuevos horizontes aparece la testarudez de torbellinos violentos: Antonio comienza  a reconquistar a Pilar. En este sentido la reconquista simboliza  el engaño y el intento de minimizar y destruir lo que había empezado a construirse. La violencia no ama la belleza sino que se apodera de ella para convertirla en fealdad. Así la violencia se regocija pensando que es dueña  y propietaria del otro. Es así como Antonio, a través, de su reconquista se convierte una visión maquiavélica de la amistad. Para la violencia no es suficiente haber agredido una sola vez, ésta intenta demoler completamente la identidad de la víctima. De esta manera la violencia se convierte también en un proceso de adoctrinamiento, de un ritualismo perverso y egoísta. Pilar y Antonio vuelven a vivir juntos como parte de un proceso de impregnación. La violencia impregna no solo lo físico sino también lo mental. Es así como la violencia busca esclavos mentales, sin capacidad de pensar y de autopoitizarse. Aquí empieza un proceso de simbiosis sin diferenciación: el agresor y el agredido piensan estar bien o intentan negar una realidad real.

La “comodidad” también significa salir de las zonas cómodas en busca de la trascendencia o autorrealización. Entonces, Pilar ha encontrado lo que más le gusta: pinturas. Tiene que salir de la ciudad, pero los prejuicios sobre la mujer le impiden: no te puedes ir, seguro que tienes otro hombre. Aquí empieza la dependencia emocional entre agresor y agredido. El lazo emocional no es sano ya que se tiene que estar subordinado a los intereses del otro. En una de las lecturas, se puede leer “como consecuencia, en esta familia se produjo una aceleración de la entropía. En los sistemas humanos la entropía corresponde metafóricamente a la cantidad de energía no disponible para un trabajo útil mientras un sistema está en transformación” (Barudy, 1998). Entonces, se puede notar, a través de la resistencia de Antonio, un intento por desaparecer la autonomía. Es un sentido de pertenencia y de cohesión enfermo, ya que no permite la realización del otro como individuo.

De hecho, la violencia de cualquier índole no siempre tiene la última palabra. Pilar decide irse. Pero la violencia no puede despedirse sin antes dejar huella para ufanarse de su fuerza irracional e instintiva. Antonio desnuda Pilar. Probablemente este es el pináculo de la violencia: despojar al otro no la ropa, sino de su identidad, de su manera de ser y exponerla en un balcón como un objeto. Es así como la violencia intenta satisfacer al espectador pasivo. Pilar se encuentra desnuda en un balcón, totalmente frágil, sin fuerzas, lo único que le queda es su desnudez. Es indefensa, tiene mucho miedo, sus partes íntimas han sido violadas y expuestas de una manera cobarde y virulenta. Es el colmo del escarnio. La inocencia se hace jirones.

Después de esta escena deplorable, pilar va a la comisaría a denunciar el hecho. Pilar piensa que los otros  tienen que hacer, pero se encuentra con una realidad cotidiana triste: se necesita evidencias físicas. En este sentido la comisaría representa una institucionalidad paupérrima que desconoce el tema de la violencia. Estos son los otros pasivos en el círculo de la violencia. La violencia no solo se da con el cuerpo.  A veces, la violencia invisible es mucho más peligrosa, en el caso de pilar una violencia psicológica constante. Por es la comisaría representa una pequeña sociedad que refuerza actos cobardes. Por eso se hace necesario presentar el ciclo de la violencia, en base a tres actores:

Sociedad Comisaría Hermana de Pilar Madre de Pilar

 

Pilar Hijo de Pilar Hermana de Pilar

Sociedad Comisaría Antonio Madre de Pilar

Es así como la violencia se hace presente, a través de diferentes actores, muchos de ellos, pasivos, espectadores.

Finalmente, Pilar decide irse, entonces, se puede decir, que es posible poner fin a la violencia y esto solo se puede llevar a cabo cuando las personas son capaces de pensar y de mirar por nuevos horizontes. La violencia psicológica es una situación, pero no es eterna. Por eso, parafraseando a Barudy se puede decir “para mantenerse como un organismo viviente, el individuo ha de poder modificar su estructura y por otra parte acoplarse a otros sistemas. Esto implica la existencia de una plasticidad estructural, como también la posibilidad de dialogar con uno mismo y con los demás” (Barudy, 1998).

Cuando la violencia no tiene estrategias se convierte en víctima: Antonio le dice a Pilar que si ella se va de la casa, se va a matar. La violencia hace uso de la manipulación cuando ya no  puede hacer nada más. Pilar, con la ayuda de los demás, se va, entonces, la violencia se queda sola (Antonio).

La violencia no ha entendido la frase “te doy mis ojos”. Pilar le decía, a través de esta frase, intenta ser capaz de ponerte en mi lugar, de mirarme con los ojos con los que yo me miro, con la misma perspectiva que la mía. Es por eso que la frase no hace más que ventilar la necesidad de la empatía activa, de leer los procesos mentales de otras personas, de mirar al otro como sujeto y no como objeto, de mirar al otro como individuo, como otro concreto que necesita ser reconocido.

 Fénix!!!